viernes, septiembre 29, 2006

Evangelizando (2a parte)

Después de la foto en la que se coló la polaca, un chimeco pasó por Josete y por mí y más weyes que iban a la conferencia. Pues nos llevaron hacia el lugar, una ciudad en las montañas de Cracovia llamada Zacopane. Muchos paisajes chiditos y todas las casas igualitas a la granja de PlayMovil. El hotel de la Conferencia estaba bien machín. De entrada, una buena cena y empezar con las charlas.
En las casas con facha de Granja PlayMovil

Una buena noticia era que, a pesar de ser un congreso de Física Nuclear, había carne de primera calidad, (eso se debe a que no es lo mismo una estudiante de física de Polonia, Noruega o Rusia que una Ecuatoriana o Oaxaqueña, (ejemplos seleccionados al azar, sin ninguna pretención)).

Pues chingonamente, había charlas por la mañana y, de las dos a las seis, nos llevaban todos los días de Tour a escalar las montañas. La neta está rete chingón, al final dolían los pies a madres, pero la experiencia fue bonita.
Josete y yo en las montañas de Zacopane.
Que merol son las montañas

Por la noche había siempre coto, nos ponían músicos regionales y bailarinas regionales también, que te sacaban a bailar las Polkas montañesas, muy buen coto, además de dotarnos de bebidas embriagantes (como tesito con vodka que me recordó al ponche con piquete de la navida). Bueno, esto no era gratis, tuvimos que pagar un billete de inscripción, pero como lo pagó el grupo de investigación, Josete y yo nos dedicamos a comer y a beber como pelones de hospicio.

El miércoles nos tocó presentar nuestro poster en la conferencia, para esta sesión, montaron unos cuantos barriles de chela y un montón de chelas en botella, había una mesa con unos 50 vasos gorditos rellenos con chela como para amamantar un pelotón. Bueno, apenas terminada la sesión de Posters, nos pusimos a ingerir con vital despilfarro, hasta que no quedó un sólo vaso y tuvimos que pasar al bar del hotel. Ese día si le tupimos duro, había mucha gente ebria, y es cagado, porque ver a Físicos Nucleares en el coto, siempre suena raro. Pero en fin, de milagro llegamos a la habitación, para despertar al otro día con la crudota y perdernos las charlas matutinas. Presentando mi postercín, hasta camisa me puse

El coto que siguió, todo el mundo está bien ebrio (chequen que la chela es de tamaño generoso)

A la tarde, con cruda moral, fuimos Josete y yo a las montañas, la gente se veía descompuesta, pero ni pedo, la excursión valía la pena. Ese día descansé del coto, pues el estómago y la cabeza me mentaban la madre.

El viernes tempranito me reventé todas las charlas, por la tarde fui al pueblo pa conocerlo. Lo típico es el queso, que es como el queso oaxaca pero esta hecho trenzita, está chidisimo, lo compras como botanita y te lo vas chingando por el camino.

Por la tarde también estuve en todas los seminarios y al final, por ser viernes, decidimos hacer una visita nocturna al pueblo. Los ingleses comandaban, pues traían el coto bien arriba, un polaco y yo nos pusimos a organizar a la gente. Finalmente, juntamos como 20 weyes y nos fuimos a buscar maldad. Una ventaja de Poland es que todo está muy barato (acaba de entrar a la unión europea) entonces no duele gastar en chela, pues cuesta 1.50 euros en antro, cuando en España cuesta el doble. Total, llegamos a un antro chido y empezamos el coto masivo.
Ya antreando (Kamilla a mi derecha) que mujer!!!

Las polacas se portaban chido y bailaban con el personal, y las chavas de la conferencia (después de tres chelas) no dejaban de bailar. Ahí me encontré a la Kamilla, una vieja de la conferencia que estaba de muy buen ver y que había estudiado Salsa. Nos pusimos a bailar cotorramente y la mujer se movía como pirinola, yo hice lo propio y saqué mis chundo pasos que en el viejo mundo causan sensación, total que ya estaba bien entrado con la Kamilla hasta que me enteré que el novio llevaba una hora viendo como le bailaba a su vieja.
Josete saludando, con Kamilla a lado... insisto, que mujer!!!!

Creo que no le latió mucho (era francés) y en poco tiempo se fueron. Yo seguí en el coto con otra polaca que conocí ahí. Más tarde se puso tan briaga que sus amigas se la llevaron. Al final se quedaron como 4 chavas bien cotorras y nos pusieron Whisky in the Jar, y nos pusimos a metalear un inglés merol y yo con la demás banda.
Yo y mi típica guitarra imaginaria
COTOTE!!!
METAAAAAAL!!!!!
Un día muy cotorro. al final, también acabamos bien briagos, principalmente los dos italianos. Nos fuimos de regreso al hotel y yo seguía cantando el "Mush a ring dum a doo dum a da" y la demás gente me hizo segunda. Pues de repente nos dio por echar una firma y buscamos el primer arbolito. Después de subirme el cierre y volver a entonar el corito metallicoso... mocos, me topo de frente con un policia (otra vez de dos metros), ante lo cual me callé como si me pusieran PAUSE. El tira nos vio con cara de ya valieron verga. El único polaco del grupo le habló, y le enseñó el gafetito de la conferencia, y cual charola de Gobernación, el hombre nos dejó continuar nuestro camino. Mis huevos regresaron a su lugar, y apenas rebasamos al oficial, volví con el corito. Ese día llegamos con la pilota al hotel, pero ya casi era de día. Decidimos dormir.
Después del encuentro con la Ley.... Puro Coto!!!

El sábado fue el día final, por la noche nos prepararon una cena de gala, y bailecín. La Kamilla me volvió a buscar para bailar, y pues a mi ya me daba pena por el novio. A la vieja le valió madre, y a la voz de super Gloria Steffan nos pusimos a salsear en medio de la pista. Pues pa' variar me puse con mis pasos chundo ñeros que como dije, aquí causan sensación, y la gente cual "Taka taka suelto en museo" nos empezó a hacer fotos y videos a la Kamilla y a mí (no me sorprendería estar ya en el youtube). Bueno, el francés ya se veía medio calientito, y como no era mi intensión armar ahí la de Dios, me despedí de la Kamilla con mirada de: nos vemos en otra vida y me fui con mis cuates italianos a seguir con el coto.

Después de apurar todas las botellas de vino existentes, aguanté hasta las 4 de la mañana para bañarme e ir a la estación de autobuses, de donde partiríamos a las 5 am hacia Krakovia para tomar el vuelo de regreso a Londres y ahí despedir a Josete y yo continuar mi tour hacia Italia, donde otro coto me aguardaba.

SEAN FELICES
Continuará... (las fotos en las que no salgo, es porque yo las tomé)

martes, septiembre 19, 2006

Evangelizando (1a parte)

Hola queridos blogueritos. Disculpando la ausencia al posteo en este su blog por ociosidad, los saludo de nuevo, no sin antes pintarles huevos a mis colaboradores por su notoria falta de imaginación. Pues yo estuve de gira evangelizadora por tierras polacas en un viaje largo y duro (sin albur), que empezó en Sevilla para aterrizar en Londres, donde pasé la noche (pues los vuelos bara baras, salen a las 6 de la mañana). La técnica es tomar el último de la noche para pernoctar en el suelo del airport y tempranito formarse para ser cateado por los pinches ingleses paranóicos.
Fig. 1. Josete y yo pernoctando en el suelo de Aigropuerto bara bara de London

A las 9 am aterrizamos en Cracovia mi fiel basayo (llamado Rafa pero conocido como “Josete”, por el barril) y yo, para esperar al autobús que nos llevara a la Conferencia en las montañas.

Como buena combinación mexicano-español, a los dos weyes se nos olvidó imprimir el horario del chimeco. Entonces le hablé a mi secre en Spain, pa que me buscara los horarios por Internaco. Justo estaba hablando con ella, cuando un perrito se acercó a mi maleta. Se veía muy simpático, pero como estaba distraído no le hice mucho caso. Me dispuse a seguir arreglando lo del horario caminando en círculos, cuando Josete me habló: Tío, Luis, que vengas pa acá. Josete estaba acompañado por un hombre de 1.80 fornido con cara de malo. Yo enseguida creí que era el chof de la conferencia. Pero al ver al perrito con su patita sobre mi mochila, y que el hombre me decía a señas que colgara, me di cuenta que no era el Chof, sino un tira polaco.

Bueno pues yo le colgué a mi secre y me dijo el oficial “This baggage is yours? Y yo le dije: Yes what is the problem? y el wey me dijo: take it and follow me. Chale, yo le dije: What is the problem, y el ojete no me contestó, y me llevó dentro del aeropuerto. Pasando los arrivals (zona de llegadas), hay un cuartito, el wey dejó al perrito con su pareja y se metió conmigo al cuartito. Me pidió que pusiera mis chivas en la mesa (que era como de consultorio médico) y sacó unos guantes de latex que se empezó a poner.

En ese momento me puse blanco (imaginenme blanco), me mareé y las piernitas me temblaban. Mientras el poli se acomodaba cada guante me decía en inglés que el can había detectado drogas en mi maleta, lo cual yo negué. Me dijo que no me hiciera wey y que mejor dijera la verdad. Yo no podía dejar de ver los guantes y apretar el culo.

Sin embargo, me tranquilicé cuando empezó a revisar mi mochila con ellos buscando la tan mentada droga. Como muchos de ustedes saben, yo sólo drogas legales (pisto y tabaco), y no estoy tan pendejo como para traerme “chocolates” de España a Polonia pa regalar a la banda. El hombre me dijo que no fuera wey y rajara, que si encontraba algo me iba derechito al bote. Yo le dije que nel, que lo único que traía era mi tan necesario Sal de Uvas (ahora con paracetamol pa la cruda) y se lo mostré. Al final se convenció y se quedó pensando. Me preguntó si traía alguna prenda en la maleta que hubiera usado un día antes en algún lugar en el que consumieran drogas. Como un día antes estaba echándome unas chelas en un bar en Huelva (donde la gente se mete hachís como si fueran caramelos) le dije que si. El wey me dio las gracias por aceptar la revisión, me abrió el cuartito y me dejó ir. De paso vi al perro y le menté la madre (como era perro polaco seguro no me entendió).

Afuera, Josete me esperaba consternado. Yo salí tembloroso pero con el honor intacto, despuecito se me pasó y nos pusimos a tomar fotos, en lo que llegaba el bus, una polaca se cruzó en una. Al final apenas el coto empezaba.

Fig. 2. Josete y yo posando con Polaca que se clava a la foto

Sean felices
Continuará….